jueves, 6 de mayo de 2010

LA VIDA EN ESTA CIUDAD


Me llamo Anastasia y soy veinte y tres años. Mis ojos son lucientes, mis pechos pequeños pero altos/altivos/altaneros y me he depilado/afeitado/rasurado el pubis/bello público/coño. Soy Anastasia y llevo pronto hace casi un año en Madrid. He aprendido la idioma de aquí. A veces leo periódicos y escribo las palabras que no conozco en un papel. ¿Sabes que es “evidencia”? le pregunto a un hombre/señor/cliente que folla con poca pasión/fuerza. Cállate, me dice. Me desconcentras. Los camareros son más amables. Algunos me miran con ganas -¿se ponen? ¿les pongo? ¿se los pongo?-. Soy bonita, soy extranjera, soy puta. De puta madre. Tu puta madre.
Pero no voy dos veces a los mismos bars. No me gusta me conozcan. Tampoco quiero repetir clientes/refollar con ellos. Pero es difícil porque son pesados y yo estoy aquí por eso ¿no?, por follar ¿no? Quiero ganar dinero, claro. Tengo pocos amigos: una compañera/colega/puta, de puta madre, Marina, sudaca de mierda, de Brasil, y un compatriota, que se hace fontanero pero vende cocaína y me dice, Anastasia tú y yo estamos saliendo de esta mierda cualquiera día.

JCA