La ORIENTACIÓN SEXUAL sería el tercer punto del que quiero hablar en este intento de deconstruir ideas planas, pero totalmente arraigadas, encastradas en nuestro pensamiento.
La orientación sexual o inclinación sexual se refiere al objeto de los deseos eróticos y/o amorosos. dentro del conjunto de sexualidad, y no tiene relación directa con la práctica sexual.
La orientación sexual se clasifica en función del sexo de la persona/s objeto de ese deseo. Podemos hablar de: heterosexualidad, homosexualidad, bisexualidad, asexualidad, pansexualidad.
Pregunta importante: ¿Cuál es mi deseo?
No es algo sobre lo que se reflexione habitualmente. Mucha intuición, pero poca claridad. Entonces surge otra pregunta, que no es precisamente inocente. ¿Podría darse el caso de que nuestro deseo se hubiera sometido a los esquemas aprendidos, de tal forma que no se hubiera desarrollado? Sólo deseo lo que puedo desear, lo que he aprendido que puedo desear. Anulo lo demas de tal forma que creo que no existe.
Quizás se trate de una protección/preservativo moral. Siempre nos movemos en los parametros de lo que está bien y lo que está mal. Somos herederos del cristianismo. Con la leche, mamamos culpa y arrepentimiento. Lo llevamos con nosotros. Deshacernos de ello es un trabajo arduo.
¿Cuál es tu deseo?
¿Se puede desear más allá de lo deseable? ¿Dónde empieza lo censurable? ¿Está reñido el deseo con el dolor, la fuerza, la humillación?
Buenas preguntas para un caluroso fin de semana.
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