jueves, 9 de diciembre de 2010

PALABRA ESCRITA


Tu palabra veloz y ágil
desgarra sueños de lana,
amortigua la soledad
de la viuda y del profeta,
acaricia los oídos infantiles,
fabrica proyectos,
desmembra tristezas.
Crea monstruos
y parásitos
tu palabra anhelada.
Tu palabra viva.
Tan viva,
ahora que todo está
terriblemente muerto.

JCA